El pasado 15 de Junio se cumplieron nueve anos años desde que se creó la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA). DACA permite que ciertos inmigrantes indocumentados que ingresaron a los Estados Unidos cuando eran niños, conocidos como Dreamers (Soñadores), permanezcan en el país.
En reconocimiento del aniversario de DACA, el Obispo Mario E. Dorsonville, obispo auxiliar de Washington y presidente del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), emitió una declaración en la que señaló la importante contribución de los Dreamers (Soñadores) a sus comunidades y a este país. Igualmente, resalto su deseo que la reforma migratoria se de en la administración del presidente Biden. Tambien manifestó: “Como Iglesia, reconocemos la dignidad inherente y dada por Dios a cada persona humana, independientemente de su estatus migratorio. Por lo tanto, continuaremos pidiendo una reforma migratoria integral que preserve la unidad familiar, respete el debido proceso, respete el estado de derecho, reconozca las contribuciones de los trabajadores nacidos en el extranjero, defienda a los vulnerables y aborde las causas fundamentales de la migración, en consonancia con el bien común."
El mismo día, el obispo Dorsonville presentó un testimonio escrito para una audiencia celebrada por el Comité Judicial del Senado sobre la Ley de Promesa y Sueño Americano. Esto sigue a una declaración emitida en Marzo por el Obispo Dorsonville y el Arzobispo José H. Gómez de Los Ángeles, presidente de la USCCB, instando al Senado a actuar.